sábado, 17 de diciembre de 2022

Cualquiera puede ser un hijo de puta

Este título no lo he puesto para retarte a serlo, sino para avisarte. Seguramente ya sabrás que cualquiera puede ser un hijo de puta… Incluso puede que tú ya lo seas.
 
Bien, a lo que voy que me disperso: las personas con diversidad funcional también pueden serlo. Ea, ya está dicho. Es más, tenemos más motivos porque guardamos mucho rencor.
 
Ahora en serio. Al hablar de personas con diversidad funcional automáticamente salen los prejuicios: pobrecito, tiene que estar mu triste, seguro que es un cacho de pan, una persona que sufre así no puede ser mala gente, vamos a tratarlo como un niño pequeño, con lástima…
 
Pero no, los hijos de puta son personas y las que tienen diversidad funcional también son personas. 
 
Ya está, no tengo más que decir. Solo eso: que cualquiera puede ser un hijo de puta. Menos los que venden higos, esos son santos.